domingo, 11 de septiembre de 2016

Llamarada de fe.


Hace una semana frente a un altar dudé
y no supe si regresar
refugiarme en sus brazos
o seguir firme a mis demonios
lloré.

Me descubrí perdida
y las personas vinieron
a decir -no regreses
todavía somos lo mismo-

Hoy estoy yéndome de nuevo
con un cariño sembrado
no sé si me ha enamorado
pero no me extraviaré por una promesa
que a las promesas las desvanece el viento
y ya nunca regresan.

No me perdones Dios

...no me perdones..
porque ya no te lo pido.

No hay comentarios: